lunes, 26 de abril de 2021

El primer tocadiscos que llegó a Jerez (1894).


La filoxera explosionó en Jerez justamente en junio del año 1894, unos meses más tarde de que se conociera el tocadisco o, como lo llamaban en la época, el fonógrafo "registrador" y "repetidor". De algún modo, aquella filoxera y aquel tocadisco forman parte todavía, de algún modo, de nuestra intrahistoria hecha de sucesos muy notables (como la plaga que afectó a nuestras viñas) y de sucesos sencillos y curiosos (como la llegada del fonógrafo a Jerez).

El entonces mágico aparato asombraba a las gentes y producía crónicas pintorescas como la que se lee en El Guadalete de 17 de enero de 1894 y que abajo reproducimos.


El cronista ofrece del invento una muy minuciosa explicación científica de su funcionamiento, quizás, podría ser, esforzándose en vencer prejuicios religiosos contra este avance de la ciencia.

El "Café del Centro" estaba en la c/ Lancería, 25, 27 y 29 y en él, a modo de atracción para que los clientes entrasen y consumiesen, debió organizarse un "gabinete" donde una persona, que obviamente cobraría por ello, mostraba el funcionamiento del novedoso invento. Aunque quizás el aparato era conocido en Jerez, de antes, en alguna de las muy ricas casas señoriales que organizaban bailes y eventos sociales para la alta burguesía.




Parece que la primera vez que se citó la palabra fonógrafo en El Guadalete fue en enero de 1883:


Crónica del primer fonógrafo que llegó a un establecimiento público de Jerez (El Guadalete, 17/01/1894):