viernes, 9 de marzo de 2018

Cifras oficiales de exportación del vino de Jerez (1934-1983).


En el año 1983, hace 35 años, el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Jerez-Xérès-Sherry y "Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda" publicó un cuadernito donde presentaba unas estadísticas de la producción vitivinícola exportada a los distintos países del mundo, sobre todo, con más detalle, en el quinquenio 1979 a 1983. Ofrecía también, en ese misma publicación una estadística de "exportaciones totales en los años 1934 al 1983", así como un cómputo de existencias de vinos, gráficas de exportación y listado de bodegas del marco.

Me parece una estadística interesante para conocer cómo evolucionó este mercado hasta, precisamente, una fecha (la de la expropiación de Rumasa) en la que algunos empresarios, mecidos por la ola liberal de Margaret Thatcher, decidieron en Jerez prácticamente terminar con la cultura del vino, la viña y la bodega tal como la hemos conocido durante siglos (me refiero a la importancia de la mano de obra artesana cualificada en los distintos procesos de producción)



Un año, 1983, donde se producen movimientos empresariales importantes, según algunos especialistas: "Hasta 1980 se venía absorbiendo por las bodegas la totalidad de la cosecha producida. Al producirse la caída de las exportaciones en la campaña 79/80 y 80/81, se reduce la absorción de mosto del año y se produce en las cooperativas del Marco una situación de excedente de mosto. Antes de la vendimia del 82 existía un excedente de 24 mil botas de mosto sin colocar en las cooperativas, y la cosecha de ese año apuntaba a los 200 millones de kilos que equivalían a casi 300 mil botas. Esa situación se resuelve en marzo de 1983 (¿) cuando las bodegas retiran el 85% del mosto excedentario, unas 85 mil botas, por un valor de 1.576 millones de pesetas" (fuente: https://www.sherry.wine/sites/default/files/el_pasado_y_el_futuro_del_vino_de_jerez_jesus_medina_garcia_de_polavieja_2014_11-18_ingreso_addemia.pdf)


Aunque este aumento de la producción de mostos en aquella época, y sus consecuencias generales en el negocio del vino del marco de Jerez, tiene mucho que discutir: "Los excedentes de vinos los ocasionan una producción de mosto por encima de la venta de vinos; pero también puede decirse que los excedentes los crea una venta de vino por debajo de la producción de mosto. En el primer caso los responsables son los cosecheros de uvas. En el segundo son responsables los exportadores. Partamos, por ahora, de que los excedentes es sólo un problema de producción. La producción de mosto puede aumentar de dos únicas maneras: bien incrementando las superficie plantada de viñedos, bien incrementando los rendimientos. Ambos fenómenos se dieron en el marco de Jerez." (p. 246), y "Resumamos: lo viticultores de Trebujena en absoluto son responsables de los excedentes de mosto. Los incrementos de superficie plantada de viñedo y lo rendimientos han ido, en el primer ca o muy moderado , y, en el segundo, los rendimientos, están muy por debajo de los límites autorizados por el Consejo Regulador " (p. 249), y "Reducción de los mostos producidos por los viticultores. La reducción de los mostos producido ha ido la única vía que ha privilegiado tanto el Gobierno como lo exportadores de vino. En fomentar el arranque de viñedos, con subvencione que iban desde 50.000 ptas. a 150.000, y en financiar los almacenados de vinos en manos de los exportadores consistió fundamentalmente el «Plan de reestructuración del Marco de Jerez». El «Plan» estuvo vigente hasta 1986 y hoy podemos darlo por fracasado, como ha puesto de manifiesto la cosecha de 1988 y 1990. Tras el fracaso del «Plan» hoy vuelve a plantearse el arranque de viñedos como solución a lo excedentes de vino. En este sentido conviene hacer unas puntualizaciones críticas..." (p. 250), (fuente: Antonio Cabral Chamorro: "Una aproximación a la crisis de la vid y del vino en el marco de Jerez: el caso de Trebujena", en: http://origin.magrama.gob.es/ministerio/pags/Biblioteca/Revistas/pdf_ays%2Fa057_07.pdf)


Una época, aquellos años 80 hasta la huelga de 1991, en que los trabajadores jerezanos se enfrentaron a los mortíferos planes de amputación del empleo llevados a cabo por la patronal: "La huelga fue el elemento central de su repertorio de acción colectiva. Destacan, en este sentido, las grandes huelgas de los años 1983 y 1987. Las bodegas están muy repartidas por toda la geografía jerezana, por lo que el sindicalista cuenta que desarrollaron técnicas de coordinación y comunicación a través del uso de walkie talkies y un periódico que se elaboraba de noche y se distribuía al día siguiente para mantener los ánimos de trabajadores y familias en una huelga que se prolongaba y los dejaba sin recursos, y los mantenía al tiempo informados de lo que iba ocurriendo en cada centro de trabajo. Además de piquetes, establecieron inteligentemente asambleas permanentes de trabajadores en las puertas de las bodegas que generaban información para estar coordinados. Y, sobre todo, en la huelga de 1987, las mujeres desempeñaron un papel central en el mantenimiento de los piquetes en las entradas a las bodegas" (fuente Eva Bermúdez y Beltrán Rocahttps://congresotransicion2017.files.wordpress.com/2017/02/mesa_2_jornaleros_as_-y_luchas_campesinas.pdf)

Por tanto, este cuadernillo de estadísticas podrá convertirse en un elemento más de estudio para cuando se vayan haciendo las investigaciones, aún pendientes, acerca de tan importantes acontecimientos para la vida social y económica de nuestro Jerez. (hacer click para acceder):